El canciller de Cuba, Bruno Rodríguez, condenó «de manera contundente» el incautamiento de un buque con petróleo venezolano por parte de las fuerzas estadounidenses, calificándolo como un «vil acto de piratería».
«Condenamos el vil acto de piratería y la incautación por fuerzas militares de ese país de un buque con petróleo venezolano, lo que contraviene las reglas del libre comercio y la libertad de navegación, en franca violación del derecho internacional», escribió Rodríguez en su cuenta de X, asegurando que esta acción corresponde a una «escalada agresiva» de Washington contra Caracas.
Por su parte, el Gobierno de Venezuela ha calificado la operación estadounidense como un «robo descarado y un acto de piratería internacional».
«La República Bolivariana de Venezuela denuncia y repudia enérgicamente lo que constituye un robo descarado y un acto de piratería internacional, anunciado de manera pública por el presidente de EE.UU., quien confesó el asalto de un buque petrolero en el mar Caribe», se lee en un comunicado difundido por el canciller Yván Gil en su canal de Telegram
