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adminNueva York.- Amaury Abreu, un ex oficial dominicano del Departamento de Policía de Nueva York (NYPD), fue sentenciado a 33 meses en una cárcel federal por participar en una narco banda internacional que traficó 500 kilos de cocaína desde República Dominicana y México a Nueva York, y filtraba informaciones a los miembros de la organización.
Abreu de 38 años de edad, fue condenado después de que un juez de la corte federal en Brooklyn dijera que traicionó la confianza sagrada dada a los oficiales de policía.
El expolicía tenía 11 años en el NYPD y una vida secreta como confidente cercano del líder de la narco banda que traficaba los cientos de kilos de cocaína desde la República Dominicana a la ciudad de Nueva York y Long Island.
Abreu participó personalmente en una transacción de un kilo en 2016 y ayudó a la red de drogas al acceder a una base de datos de arrestos del NYPD para verificar si un miembro de la pandilla tenía una orden de arresto en su contra unos días antes de que el hombre viajara a República Dominicana, dijeron los fiscales.
También proporcionó al líder de la red, Ramón Romero, información sobre una operación policial contra miembros de una red de narcotráfico rival, y le proporcionó una matrícula para ayudarlo a evitar la atención policial, dijeron los federales. Romero se declaró culpable de conspiración para importar narcóticos en junio.
Abreu, que trabajaba en el cuartel 113 de Queens, fue arrestado en noviembre de 2020 y se declaró culpable de un cargo de conspiración para traficar narcóticos en 2023 y se retiró de la policía ese mismo año.
En una súplica de clemencia al tribunal, Abreu pidió tres meses de arresto domiciliario y dijo que sentía tremendo remordimiento, vergüenza y arrepentimiento por sus acciones.
Decenas de miembros de su familia llenaron las filas en su audiencia de sentencia en el Tribunal Federal de Brooklyn incluido su padre enfermo a quien cuidaba.
Abreu dijo que trató equivocadamente al líder de la red de drogas como a un mejor amigo y a un hermano, y que debería haberse alejado después de conocer su verdadera naturaleza.
“Mi lealtad debería haber sido hacia mis amigos y mi familia, mi familia y el público al que serví”, dijo. “Dejé que mi necesidad de validación me pusiera a mí, a mi familia y a los ciudadanos comunes en riesgo”.
Le prometió al juez William Kuntz que nunca más volvería a terminar en un tribunal penal. “Todo lo que quiero hacer es intentar enmendar mis errores”, dijo.
La fiscal federal adjunta Erin Reid señaló que el crimen de Abreu no fue un incidente aislado relacionado con un tráfico de drogas en 2016, sino que ayudó a la red varias veces e incluso viajó a República Dominicana en 2020 para reunirse con Romero.
Abreu debe entregarse antes del 20 de enero para comenzar a cumplir su sentencia.
Los fiscales dijeron que Abreu fue arrestado y acusado en la corte federal junto a los también dominicanos Julio Bautista, Gustavo Valerio, César Díaz Bautista y Junior Ortiz.
El comisionado del NYPD en ese tiempo, Dermot Shea, advirtió tras las acusaciones a Abreu, que la corrupción no tiene cabida en la uniformada.