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adminRedacción internacional.- Pierre Hugues Saint-Jean, presidente de la Asociación de Farmacéuticos de Haití, informó que cinco farmacias reconocidas por el Ministerio de Salud Pública y Población (MSPP) fueron incendiadas. Mientras otras farmacias, no reconocidas y cuyo número exacto se desconoce, también fueron destruidas por las llamas lo que afecta aún más la disponibilidad de medicamentos.
«De los 216 laboratorios que abastecen oficialmente a las farmacias en Haití, solo tres están ubicados en el país, los otros 213 están en el extranjero. Si estos laboratorios no encuentran la manera de enviar medicamentos a Haití, las agencias no podrán abastecer a las farmacias. Como resultado, es posible que los pacientes no tengan acceso a ciertos medicamentos», explicó Hugues Saint-Jean.
El presidente de la Asociación de Farmacéuticos de Haití agregó que «los laboratorios locales cubren entre el 25 y el 30 por ciento de las necesidades de medicamentos. Uno de los tres existentes está inactivo por inseguridad y los otros dos están operando por debajo de su capacidad máxima. Esto afecta a la disponibilidad de medicamentos. Hay muchos problemas en cuanto al suministro de insumos, lo que tiene consecuencias para el sector de la salud y el sector farmacéutico».
Asimismo, Hugues Saint-Jean dijo que algunos pacientes pueden verse obligados a interrumpir sus tratamientos ante la falta de medicinas, lo que podría tener graves consecuencias para su salud.
«Las solicitudes de medicamentos han aumentado entre un 200 y un 300 por ciento. Así que nos enfrentamos a una escasez», agregó.
Hugues Saint-Jean aseguró que las ciudades de la provincia serán las primeras en verse afectadas ante la escasez, señalando que no tienen grandes capacidades de almacenamiento y dependen únicamente de los proveedores de la capital del país. En cuanto a los medicamentos, expresó que las necesidades prioritarias son los antibióticos, los productos para la hipertensión, la diabetes, insumos médicos, como los catéteres, y los tratamientos para enfermedades crónicas.
«Cada día sin estabilidad empeora la situación. En cuanto a la política farmacéutica, el riesgo de falsificaciones está aumentando porque la demanda es alta. Los falsificadores no están ociosos y el contrabando de medicamentos no controlados a través de las fronteras aumentará», concluyó.